Que fea es esa sensación de no esperar ver algo; dar dos pasos, abrir una puerta y encontrarte con lo que no estas listo para ver. Y cuando querés darte cuenta de lo que estas sintiendo cuando lo ves, una duda te confunde y pensas que lo que ves, no es lo que realmente es.
Pero si, eso que veías, alguna vez tuvo vida, alguna vez te dio un beso y un abrazo y te dijo con incredulidad "¡PERO QUE GRANDE QUE ESTAS!". Te imaginas si esta sintiendo algo en el momento, aunque sepas que ya no siente nada. Tratas de pensar un día con esa persona, y se te ocurren cosas que podrían estar haciendo juntos pero ya no, porque no puede hacer nada mas que yacer en donde esta y dejar que lo observes con curiosidad, nostalgia y un poco de miedo. No querés ni si quiera rozar su piel, aparenta ser fría y seca; sus manos están frías y calmas también, sus dedos entrecruzados, sus labios sellados, su mirada apagada por sus mismos párpados y en su cara solo vez puros rasgos de paz.
Pero en lugar de tener la típica
Esa persona esta muy tranquila ahora y aunque no este presente, lo esta, y aunque no lo vuelvas a ver, quizás algún día te sorprenda y te lo encuentres con mas vida que cuerpo y con mas serenidad de la que alguna vez le viste en su velorio...
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